Cuando dices que si...

Este fin de semana El Perro y yo celebramos nuestro 11º aniversario y hoy, en un breve momento de tranquilidad que me di en medio de los preparativos vacacionales, recordé el día en que decidimos pasar el resto de nuestra vida juntos.

Recuerdo aquel día mientras caminábamos por una conocida calle del centro de esta ciudad y mi ahora esposo me dijo a quemarropa: "sabes algo? cada día se me hace más difícil dejarte, y el tiempo contigo es muy breve y apenas llego a mi casa ya quisiera estar contigo. ¿Te casas conmigo?"

Y así, sin pensar, como lo más natural, solo voltee a mirarlo y dije: "si, si quiero casarme contigo". Él me abrazó y dijo: "ven, vamos a escoger tu anillo".

Aún pienso en ese día y en lo sencillo que fue el momento. Ambos sabíamos lo que queríamos, no nos hizo falta música de fondo, arrodillarse o la luz tenue de unas velas para fabricarlo. Solo un gran amor y la inmensa necesidad de estar juntos y completos para siempre.

Doy gracias a Dios, porque en ese momento, como hasta hoy pude y puedo estar convencida de esa decisión tan trascendente de mi vida, por haber enviado a mi a ese compañero que me complementa y me hace tan feliz.

Hay quien me ha dicho que no debería de amarle tanto, que la vida da muchas vueltas y que puedo salir lastimada. La verdad, siento pena por esas personas, porque nunca han sentido un amor así, porque aún no se han dado cuenta que el amor a medias no es amor, que debemos amar como si fuera el último día al lado de esa persona que ha transformado nuestra vida.

Hoy vuelvo a renovar mi promesa de amarte cada día de mi vida, de respetarte y estar contigo en salud y enfermedad, en prosperidad o pobreza y en cualquier tipo de circunstancia y amarte completamente sin temor, sin reserva y sin escatimar nada.

Amor mío, vamos por los siguientes años tomados de la mano...

Cuando obtienes lo que deseas.

Estoy literalmente enterrada en las cobijas a las 11:24 de la mañana. Se que debo limpiar esta casa y terminar como mil pendientes del trabajo pero estoy congelada.

Resulta que con las entradas de los frentes fríos, la inminente y próxima llegada del invierno y las nevadas en la sierra y Juárez, esta un frio bárbaro. A éso agréguese una casa de infonavit (hecha totalmente de block).

Lo irónico es que hace menos de un mes dije: "lo que necesitamos es que este invierno si haga frio en serio, no como el año pasado". Las personas normales, solo me tiran una mirada de "probablemente está loca" o "deben ser secuelas de vivir en la sierra", lo que me lleva a narrar otro de los muchos "deseos cumplidos".

Cuando eramos recién casados fuimos de luna de miel a la sierra a una cabaña y una noche, mientras platicabamos recostados sintiendo el frio decembrino, solté una exclamación mas o menos así: "te imaginas lo bonito que sería vivir en un lugar como éste, en una casa como ésta?.

Dos años más tarde, me encontraría durmiendo durante 4 años en ESE lugar, en ESA misma casa y en ESA misma recámara.
Y aunque ese tiempo en la sierra fue muy especial para nosotros, debo confesar que con el tiempo he descubierto una cosa... Desear puede ser muy bueno, o tal vez malo, pero lo realmente interesante es que PUEDE CONVERTIRSE EN REALIDAD!!!, por lo que este consejo les doy porque Popeye el marino soy:

TENGAN CUIDADO CON LO QUE DESEAN PORQUE PUEDE CONVERTIRSE EN REALIDAD!!!.

Cuando te das cuenta de lo friki que eres...

Se que soy friki, lo reconozco. Es más, he echo algunos de los tantos tests que hay en la red para ver si eres friki y si lo soy. Lo que sucede es que como que de repente se te medio olvida o no eres tan completamente conciente de tu verdadero ser.

Generalmente un friki se ve y siente expuesto y un tanto vulnerable cuando se encuentra siendo examinado por otros en medio de un silencio incómodo que él mismo ha provocado con algún comentario que resulta imposible de interpretar para el individuo normal y común.

Eso me ha pasado ayer y contrario a lo que esperaba o imaginaba, fue más bien chusco y nada estresante.
Estando en el trabajo, en medio de una exahustiva preparación para una inspección, mientras organizaba una gran pila de expedientes escolares, mi directora dijo algo así como: "siento que esto ya lo había vivido..." a lo que la subdirectora añadió: "un deja vú". Cualquier friki que se respete sabría lo que vino a salir de mi boca a continuación: "no, es un error de la matrix".

No habría volteado, si no hubiera percibido esa extraña y a la vez, conocida sensación de que todos te observan en silencio como a un ente desconocido. Y así, ante la mirada atenta de mis dos jefas-amigas, decidí que era necesario preguntar que pasaba. "¿Qué?" -dijo mi directora. -Ahh un error de la matrix -repetí.

Como vi que parecía ser necesaria una explicación (que probablemente no querían), les dije: -es lo que le dijeron a Neo cuando vio al gato la segunda vez..., ¿no? " -creo que en ese momento debí haber dicho algo así como: "olvídalo, no fue nada importante", pero seguí hundiéndome más: "Si, cuando van por las escaleras y que lo ve y luego lo vuelve a ver y dice 'deja vú' y Trinity y Morpheo voltean y le dicen que los deja vú no existen, que es son errores de la matrix y que vienen agentess.... bueno, olvídenlo, lo que pasa es que me gusta mucho Matrix..."
-"Se nota" dijeron a coro y seguimos trabajando mientras creo que me miraban con curiosidad y quizás hasta con un poco de miedo... igual y a mí se me hizo gracioso y extraño a la vez, ¿Cómo es que no recuerden una frase tan memorable como esa?... ok, si soy friki.

Decisiones

Llegan momentos en la vida, en los que te encuentras en encrucijadas, en los que tienes que crecer y tomar decisiones y lidiar con sus consecuencias.
Siempre que me he encontrado en estos episodios de mi existencia, no puedo evitar esa sensación de desazón, esa impresión de no estar segura si lo que se elige es la mejor opción, si será cierto eso de "mas vale malo conocido que bueno por conocer".

Por lo general las decisiones de mi vida han sido buenas, o al menos no me he arrepentido de ellas. Gracias a ellas, vivi en un lugar hermosisimo durante cuatro años y conoci lo que es nevar de verdad, he tenido algunas excelentes, como elegir a la persona que llena de magia y felicidad mi vida y otras, que han sido las mejores pero no han dejado tan buen sabor de boca.

No sé que habría pasado si mis opciones hubieran sido otras, o si la elección que hice, diferente. Pero eso es crecer, es madurar, es aventurarte al futuro sin nada mas que esperanza en que vendrán tiempos mejores, pero sobre todo, que la voluntad de Dios se expresa a través de ello y que siempre que nos pongamos en sus manos y confiemos en que Él tiene control sobre todas las cosas.

Cuando un amigo se va

Es difícil pasar de una etapa a otra. Es difícil imaginar que alguien a quien veías a diario va a distanciarse un poco. Aunque sepas que es para mejor, alejarte de un amigo no es una tarea sencilla. Hoy una amiga y hermana querida se va de mi trabajo y aunque espero seguirla frecuentando no deja de darme nostalgia pensar que esas bromas y anécdotas cotidianas se acabarán.

Sobre todo cuando esa amiga es un oasis en el desierto, cuando es el lado amable, el refugio en la tormenta...

Hoy me siento melancólica, saber que mañana es todo lo que nos queda y que después ya no estará tu sonrisa hace que me sienta un tanto sola. Lo que me hace sonreirte aún, es saber que vas hacia el camino que Dios te ha puesto y que vas a crecer y ser de bendición en otro lugar.

Gracias por tu amor, tu amistad, tu risa franca. Gracias por ser mi amiga querida y por tenerme cada día en tus oraciones, tú estás en las mías y en mi corazón.

Del temor y la confianza

Mientras miro en las noticias el pánico de la población por los casos de influenza, pienso que quizás las personas temerán acercarse unos a otros. Quizás y hasta miren con terror si alguien estornude o tosa cerca de ellas y no puedo evitar una idea en mi cabeza: la entrada de la enfermedad en nuestra vida a causa del pecado. El temor que ingresó a nuestro corazón desde el mismo instante en el que el hombre se separó de Dios. Nuestro ser anhela fervientemente aquel momento en el que la muerte será derrotada para siempre y cuando no existirá ni enfermedad, ni dolor, ni llanto. Sin embargo, me niego a vivir en el terror. Veo a mi alrededor muerte, odio, destrucción, pobreza, enfermedad, dolor y miedo... mucho miedo. Veo que las personas creen que la paz está ausente, como consideran que todo está perdido. Afortunadamente puedo confiar en que la paz no es un elemento externo a mí, la paz, la que es verdadera, proviene de aquel que tiene bajo su control todas las cosas. Así que por nada estaré afanosa, sino que decido confiar, decido echar fuera el temor, porque el verdadero amor echa fuera al temor, combatiré armada con el amor y la fe y dejaré que su paz, aquella que sobrepasa todo entendimiento llene mi corazón y guarde mis pensamientos en Cristo.
Seguiré sonriendo y confiando en el Todopoderoso.